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miércoles, 24 de marzo de 2010

LECTURAS / narrativa chilena

EL ARTE DE LA RESURECCIÓN, de Hernán Rivera Letelier, premio Alfaguara 2010
por MARÍA A. LEMA


Justo quince años después de la primera edición de "La Reina Isabel Cantaba Rancheras" y luego de tantas novelas con personajes inolvidables, Rivera nos vuelve a su desierto, esta vez a una mezcla de historia y fabulación, basada en un personaje nuestro, chilensis, pero de nuestra historia cotidiana, aquella de los pequeños acontecimientos que nadie consigna y que finalmente salen del recuerdo de la gente y se pierden en el olvido: la historia de Domingo Zárate Vega, el llamado Cristo del Elqui; polémico personaje que durante 22 años recorrió los caminos de Chile cumpliendo una sagrada promesa: predicar el evangelio.
El texto comienza con dos referencias importantes y contrapuestas sobre este personaje, los Sermones y Prédicas del Cristo de Elqui, de Nicanor Parra y una carta escrita por el Obispo de La Serena, en 1931.
Diferentes narradores nos van adentrando, a través de los 29 capítulos que estructuran esta historia, en los avatares de este solitario, vilipendiado y a la vez alabado “… Cristito de conventillo…”, avatares que se entrecruzan con los de otros interesantes y bellos personajes, como Magalena (sic) Mercado, el Loco de la escoba, el vendedor de pájaros, etc. y con otros, que nos sorprenden saliendo de las páginas de sus anteriores novelas y se nos aparecen o son mencionados en ésta, como el mismo Vendedor de pájaros.
A medida que avanzamos en su lectura empezamos a detectar un claro paralelismo entre los sucesos que acontecen al Cristo de Elqui y ciertos pasajes bíblicos que van refrendando su apostólica vida y convenciéndolo de que su misión es de predicción divina.
Es curioso como este personaje del Cristo de Elqui nos remite a nuestras actuales campañas electorales, donde los candidatos, también recorriendo el país, van juntando electores y ofreciendo milagros que a muchos nos parecen un chiste de mal gusto, pero con la diferencia que al Cristo de Elqui le animaba un convencimiento absoluto de su santidad y con otra gran diferencia, las mentiras de estos políticos, no preocupan para nada a nadie, ni menos a nuestra Iglesia, como sí lo fue en los tiempos de Zárate.
Como en su novela “Santa María de las Flores Negras”, Rivera Letelier logra conciliar la historia verdadera de este personaje, consignada en sus propios libros y en los medios de prensa de la época, con las historias del día a día de sus personajes ficticios, empampados en ese bello y a la vez desolado desierto salitrero, donde siempre la realidad de hombres y mujeres será asombrosamente extraordinaria y desbordante y de donde este autor exprime a fondo la memoria de sus habitantes y la suya propia.



martes, 23 de marzo de 2010

IMPRESIONES SOBRE EL TERREMOTO / por Angélica Lema, especial para Farolito Rojo

Dedicado a mis amigos que viven en el norte de Chile, fuera de la zona de catástrofe o en otros lugares del mundo.
Queridos amigas y amigos, se han salvado de una grande. Nuevamente nuestras nunca bien ponderadas placas de Nazca y la Sudamericana se han visto en la necesidad de acomodarse, de desplazarse, no un poquito, sino se han pegado un empujón que han dejado a medio Chile mal parado o, lisa y llanamente, en el suelo.
Entre la experiencia vivida a tres semanas de este megaterremoto y con la cabeza llena de tanta información que nos llega por las vías menos imaginables, me encuentro con un pupurrí de hechos de todo tipo… unos muy tristes, que te producen la impotencia de saber que sólo podemos aportar cada uno, un granito de arena. Otros hechos, suscitados por esta tragedia, nos han desconcertado y hemos quedado de una pieza, con una expresión similar a la de Mafalda… Otros, ya solamente nos han provocado risas, risas nerviosas y también dolorosas, que nos demuestran lo que realmente es este país tan exitoso, tan rimbombante y deshumanizado… Como dice el pesado de Fernando Villegas “… este país que no queremos”.
Ni hablar de las comunicaciones… me di cuenta que al parecer recién estamos saliendo de las señales de humo, que los miles de móviles hipermodernos que circulan son, en emergencia, como los famosos celulares de palo que estuvieron en boga hace un tiempo… cuando recién estaban apareciendo y servían sólo para tirar pinta.
En el momento de la tragedia ni nuestra Presidenta tuvo acceso a su utilización.
La energía eléctrica desapareció y en muchos barrios y comunas de Santiago, sólo se alumbraron, por varios días, con tímidas velas, porque las linternas se agotaron, pero a partir del día posterior al del terremoto… así somos.
De la electricidad en las zonas más afectadas, ni hablar… claro, habrán dicho las pinches empresas que la distribuyen, para qué querrán luz si ya no tienen ni casa… y aquí estamos rezando para que el apagón o Black out como le llaman, que nos aconteció a dos semanas del terremoto y que dejó como loro en el alambre a miles de “clientes”, no se vuelva a repetir.
Los comentarios sobre el tema de la construcción y distribución de las viviendas de emergencia han sido de lo más variados: que las casas de emergencia son una mierda, dijo un alcalde y que las devolvería… Que no son tanto porque igual abrigan y no estamos como los cavernícolas, dijeron otros; que las casas rusas que llegaron son las mejores, pero son poquitas; que las prefabricadas canadienses que instalaron en Colina no tienen madre, pero son más caras; que el adobe es una cagada y se fue todo el patrimonio arquitectónico a las pailas… que no es ninguna cagada porque sólo necesita un entramado de mimbre...dicen los arquitectos y así, todo el mundo pelea y no se pone de acuerdo… y la gente, allá, en el sur, arriba de los cerros, rezaquetereza para que le entreguen lo que sea, para que los cabros chicos que se salvaron del maremoto no se mueran, ahora, de frío.
Ni hablar de las informaciones desde las autoridades, que si no fueron a destiempo, no fueron y eso ha costado cientos de vidas. A estas alturas, ya por cualquier movimiento la gente corre a los cerros. Entre correr y no correr, más vale equivocarse... dicen… y los pescadores, con su conocimiento ancestral son los que más vidas han salvado… Pero la cosa no para ahí, hace unos días un canal de televisión nacional hizo una entrevista callejera y la pregunta era: ¿qué es un tsunami? y adivinen….chanchaaaan, casi nadie sabía!!! Y seguimos enseñando a los cabros chicos tonteras intrascendentes, que las olvidan después del recreo.
Bueno, del cambio de mando en medio de las réplicas más fuertes, habría tema para mucho…Ya todos Uds. habrán visto en los informativos las caras entre nerviosas y aterradas de los invitados nacionales e internacionales, parlamentarios y otros. El nerviosismo que le jugó chueco a medio mundo, incluidos Presidenta que salía y Presidente que entraba, problemas con las bandas, con la piocha de O`Higgins? Que no tenía el gancho y se les cayó un par de veces; el protocolo se esfumó y Piñera terminó ahí mismo escribiendo la toma de juramento de su gabinete… en fin; mientras tanto casi nadie se daba cuenta mucho de todo esto porque estaban pendientes de las lámparas que amenazaban con su ruido y vaivén. Como si fuera poco, fuera del edificio del Congreso todos corrían a los cerros, porque la autoridad daba alerta de tsunami. Como dijo Matías de los Ríos en Tolerancia Cero: una vez más el congreso y sus parlamentarios no se enteran de lo que pasa fuera de su insigne edificio.
El tema de las inmobiliarias que se están haciendo las locas frente a los que aún pagan dividendos por sus departamentos que están en el suelo, lo dejaremos para otra ocasión porque está demasiado peludo… Ojalá, entre réplica y réplica, se resuelva… a favor de los damnificados, desde luego.
Amigas y amigos, así están las cosas por acá... Lo importante es que al parecer todo el mundo está ocupado y urgido y nadie se aburre, ni siquiera nuestro hiperventilado Presidente Sebastian Piñera, que no deja trabajar a sus ministros y él está haciendo todo, todito, porque así se asegura que las metidas de pata corran sólo por su cuenta y nadie le pele a su empingorotado gabinete.
Desde este Santiago que no está tan a mal traer, por lo menos de Plaza Italia para arriba, les saluda con cariños.

Angélica Lema
Santiago, Marzo de 2010.

lunes, 15 de marzo de 2010

EVOCACIÓN DE JEAN FERRAT

Informa la agencia EFE que el cantautor francés JEAN FERRAT, uno de mis favoritos, ha muerto. El parte noticioso dice:
“El cantautor francés Jean Ferrat murió el sábado 13 de marzo, a los 79 años de edad. Era uno de los últimos representantes de la ‘chanson’ más política.
Ferrat nació en el 26 de diciembre de 1930, en la región de París. De nombre real Jean Tenenbaum, cambió su nombre al ser deportado su padre, un judío, por los nazis. Ferrat comenzó en la música tocando la guitarra en una orquesta de jazz. En 1956 puso música al poema de Louis Aragon ‘Les Yeux d’Elsa’, la canción que fue interpretada por André Claveau, uno de los más populares cantantes de la época.
Con ‘La môme’, publicada en 1960, Jean Ferrat empieza a hacerse un nombre en la chanson. Tres años más tarde llega, con gran éxito comercial, ‘Nuit et brouillard’, y en 1964 publica una de su más populares canciones, ‘La Montagne’. En 1965 ve la luz ‘Potemkine’, canción dedicada a la rebelión del acorazado Potemkin de la armada rusa, en 1905.
Ferrat chante Aragon”, álbum aparecido en 1970, vende en un año un millón de ejemplares. Poco después anuncia su retirada de los escenarios, que hará efectiva en 1973. Con ‘La femme est l’avenir de l’homme’, de 1975, logra otro de sus mayores éxitos, comparable a ‘La montagne’.
Retirado en Antraigues-sur-Volane, un población de unos quinientos habitantes, espacia cada vez más la publicación de discos. En 1980, para conservar el control de su producción, en manos de Polygram hasta ese momento, regraba sus ciento veinte canciones, que son publicadas en una caja.